01 LA QUINTAESENCIA DE LO EXTRAORDINARIO

Para celebrar el 170 aniversario del frasco de abejas, Guerlain se une con la Maison de joyería francesa Chaumet para crear una pieza única en el mundo, el Bouquet de la Cour. Una verdadera obra maestra de la joyería, que brilla con 658g de oro* y 336 diamantes*, para un total de 55 quilates*. Esta pieza, la quintaesencia de lo extraordinario, es más que nunca el testimonio de la excelencia de las dos Maisons. Único hasta en su contenido, el Bouquet de la Cour albergará en su interior un perfume seleccionado por el cliente entre las numerosas creaciones olfativas icónicas de la Maison Guerlain.

*Se trata de una pieza de artesanía artística, el gramaje y la pureza del oro pueden variar.  

02 CHAUMET Y GUERLAIN, UNA UNIÓN IMPERIAL ATEMPORAL

Bajo el oro y los diamantes, este objeto de arte puro narra sin palabras la historia de dos Maisons que comparten numerosas similitudes, empezando por un emblema común: la abeja. En 1853, cuando Pierre-François-Pascal Guerlain diseñó la Eau de Cologne Impériale y el frasco de abejas con motivo del enlace de la emperatriz Eugenia y Napoleón III, Chaumet suministró sus alianzas. Guerlain y Chaumet fueron así nombrados "Proveedor Oficial de Su Majestad" y "Joyero Oficial del Imperio", respectivamente. Con un patrimonio similar, valores idénticos y un amor por la artesanía artística, estas dos Maisons excepcionales comparten un fundamento común.

03 UNA OBRA MAESTRA DE LA JOYERÍA ÚNICA EN EL MUNDO

Guerlain y Chaumet, entrelazando sus raíces, han creado el Bouquet de la Cour, una obra maestra de refinamiento y saber hacer que sublima el símbolo delicado de la abeja. Chaumet ha creado un adorno exclusivo para sublimar el frasco de abejas de Guerlain, inspirado en su emblemático diseño Bee My Love. El cuello y los hombros del frasco se decoran con alvéolos de oro cincelado que evocan los secretos de la colmena. Esta cota de malla se mezcla con gracia a las 69 abejas originales del emblemático frasco de abejas de Guerlain, creando así una unión emocionante entre pasado y presente. El lujo en su máxima expresión es una placa de oro con una abeja de diamantes en la ventana del frasco, una invitación a la personalización con un nombre, un mensaje, unas iniciales o una fecha.

04 UNA DIADEMA PARA CORONAR EL FRASCO

La tapa del frasco encierra un secreto escondido: un impresionante anillo coronado por un majestuoso diamante de 2 quilates*, que se puede llevar por separado. Esta talla exclusiva de la Maison Chaumet, bautizada como "talla Emperatriz", es la más luminosa. Hexagonal y compuesta por 88 facetas, brilla mucho más que una talla "brillante" clásica, compuesta tradicionalmente por 57 facetas. Un anillo de oro sumamente solar, que juega con las delicias de la luz sobre cada uno de sus rayos y sus 20 diamantes laterales*.

*Se trata de una pieza de artesanía artística, el número y la pureza del diamante puede variar.

05 UNA SINFONÍA DE SABER HACER EXCEPCIONAL

En el corazón del taller de Alta Joyería, una pieza espectacular cobra vida, creada minuciosamente por los artesanos de la Place Vendôme para suscitar asombro. Son necesarias casi 270 horas de trabajo a mano para componer meticulosamente este delicado entramado de alvéolos de oro y diamantes, unidos por la técnica fil-couteau, característica de la Maison. Los alvéolos hexagonales perfectos y los ángulos marcados se consiguen gracias a técnicas de alta precisión tomadas de la relojería. Cada uno de los gestos de los artesanos joyeros es una sinfonía de precisión, impregnada de un saber hacer ancestral y de una atención minuciosa.